Solo el amor puede prometer,
porque vive de ilusiones.
Tú que has llenado de pájaros
el espacio desierto del excepticismo
y llevas como una acequia
el porvenir fértil y la esperanza.
Cómo no desenterrar los cimientos antiguos
de la existencia,
para que la luz inunde y los confunda
con la vitalidad de los tallos nuevos.
También yo, te visité esta noche.
Como un aire tibio recorri tu cuerpo
de flor ahogada en sueños
y en el cáliz de tu boca sucumbí encantado
por la embriaguez dulce de tus labios.
viernes, 16 de abril de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario